jueves, 19 de diciembre de 2013

ALGÚN DÍA...

Quisiera encontrarte en el futuro, algún día,
y ver si se cumplieron tantas cosas que decías,
quisiera recordarte tantas otras que yo dije,
promesas que no cumpliste, víctimas de rebeldía.

Quisiera que entendieras mis silencios, algún día,
que sientas que en fondo no eran lo que parecían,
quisiera repetirte una y otra vez mis versos
para que en ellos se pierda la razón de tu partida.

Quisiera saber cuánto callaste, algún día,
oir de tu boca respuestas a mis poesías,
saber qué se siente cuando te hablan desde dentro,
saber que, en el fondo, lo mismo que yo sentías.

Quisiera encontrarte en el futuro, algún día,
que entendieras mis silencios y todas mis poesías,
repetirte qué se siente con promesas incumplidas,
y que sepas que, en fondo, yo sabía lo que sentía...

M.L.

TORPE

Son torpes las palabras al describir sentimientos,
son torpes mis ojos cuando evitan lágrimas,
es torpe mi cuerpo cuando pido que se aleje
de esas cosas que, con miedo, jamás quisiera olvidar.

Torpe. Por condición o por castigo,
por la angustia de intentarlo cuando no ha de poder ser.
Torpe. Por decisión o por destino,
pues seguiré persiguiendo sueños al amanecer.

Torpe. Por intención o sin quererlo,
sin maneras de entenderlo pero con resignación.
Torpe. Por odiarlo o por sentirlo,
con lo dulce del saludo y lo amargo del adiós.


M.L.

martes, 10 de diciembre de 2013

AÑORO

Añoro aquellos años
en que escribir a máquina era todo un arte.
En que el romanticismo era bello
y no una conveniencia social.

Añoro aquellos tiempos
donde un beso era realmente valorado,
donde darse la mano significaba algo más,
y soñar estaba al alcance de muy pocos.

Cuando el cielo no se teñía de negro,
el mejor camino era el que se hacía acompañado,
no existía comida como la de mamá,
y llegar tarde a casa era todo un riesgo.

Añoro aquella época
cuando la poesía significaba algo,
cuando relatar historias se convertía en volar
hacia un lugar al cual pocos tenían acceso,
cuando la literatura se respetaba,
y los libros no eran meros objetos decorativos.

Extraño los días
en que una conversación era mejor que un programa de televisión,
en que la familia era lo más importante,
los amigos eran de verdad,
y las promesas no volaban al primer viento que soplara.

Echo de menos tanto
que ni siquiera he vivido...

Echo de menos tantas cosas
que imagino en mis textos
y que en la realidad se me escapan...

Quizá sea mejor así, o quizá no,
mas conservo la certeza
de que mis versos seguirán
a pesar de que se vayan tantas otras cosas.

M.L.

martes, 19 de noviembre de 2013

BIEN ES CIERTO

Huímos de la nostalgia,
mas añoramos recuerdos,
sufrimos con la distancia
y anhelamos los encuentros,

suspiramos con detalles,
y odiamos sorpresas vagas,
somos dos en la pareja
y uno si hablamos de cama.

Somos retales de sueños
unidos por desengaños,
cómplices de mil silencios
que con palabras ahogamos,
múltiples dudas atacan 
si hablamos de corazón,
pero si hablamos de amor,
todo el mundo es el más sabio.

Ansiamos todo el olvido
cuando de dolor se trata,
mas si es de aquella persona
mejor no olvidar jamás,
mejor seguir esperando
a que llegue ese milagro
que haga que quizá algún día
todo, o nada, cambiará.

Bien es cierto que vivimos
con la idea de morir,
y si por vivir eternos
pudiéramos discutir,
quizá es mejor que esa idea
jamás pudiera existir.
Pues serían infinitos
los recuerdos a extrañar,
la distancia por sufrir
y encuentros por anhelar,
así como las sorpresas
que jamás nos van a dar.

Y así es como aquel destino
del que tanto se alardea
puede separar caminos
que nacieron siendo hilera...

M.L.



lunes, 18 de noviembre de 2013

HE APRENDIDO

He esperado durante años
el desenlace de aquello que llaman vida.

He llamado a puertas cerradas con llave
con la ilusión de encontrar tras ellas alguna respuesta.

He escuchado murmullos
creyendo que eran canciones de amor,
o poemas quizá, tímidos, escondidos...

He soñado reencuentros y vivido pesadillas.

He reído con todos,
he llorado con nadie
y he sentido contigo.

He olvidado rencores
y entregado perdones injustificados.

He subido la escalera de tu cuerpo
y encontrado en la cima todo un mundo
aún por descubrir.

He dejado de idealizar
para empezar a crear, a inventar, 
a escribir sobre folios en blanco historias alucinantes
que nadie más se atreve a contar.

He buscado en mi pasado
soluciones para mi presente.

He aprendido.
Sobre todo, he aprendido
a vivir, a disfrutar...

He aprendido a aprender.

M.L.

martes, 15 de octubre de 2013

NUESTRA HISTORIA...


Vivimos...


sonrisas y llantos,
abrazos y golpes,
desidia y pasión,
amor y descaro,
rosas e insultos,
besos y daños,
sexo y tristeza,
cielos y nubes,
caricias y desprecios,
paseos y huídas,
sorpresas y decepciones,
suspiros y lágrimas,
vueltas y abandonos,
luces y sombras,
cariño y odio,
hoy, mañana, ayer,
pero sobre todo hoy...
miradas y quebraderos,
sueños y mentiras,
pasteles y limones,
cafés y chocolate,
mimos y dureza...

Por eso. 

Por lo demás y por lo que aún no fue.
Porque además de tu risa me acompaña tu furia,
porque cuando aparece tu llanto sé que esconde un te quiero,
porque sigues creciendo conmigo y sigo creciendo contigo,
por complicidad, por deseo, por confianza...

Porque llegas a entenderme como quizá nadie antes lo había hecho,
sólo por el hecho de intentarlo,
y porque entenderte a ti ha sido mi asignatura pendiente los últimos meses,
y aquí estamos...


Por tus pasos firmes cuando se trata de mi, de nuestra historia,
porque una sóla llamada alivia males inexistentes en apenas segundos.
porque estás, porque estuviste, y porque quiero que estés.
Proque eres tú, y será contigo...

Eres lo que le hace falta al mundo, estoy segura,
pero sobre todo...

eres lo que me hace falta a mi.


M. L.

lunes, 7 de octubre de 2013

TÚ...

Disfonía al no poder pronunciar tu nombre,
sensación de alivio al discernir tu voz entre los murmullos del resto del mundo,
mi almohada son tus sueños,
y tu cuerpo mi descanso.

Sospechas de futuro entre caricias furtivas
plagadas de sensaciones indescriptibles,
anuncio de una noche inolvidable
cuando son tus pies los que, tan fríos, juegan rebeldes con los míos.

No encuentro en otros ojos mi reflejo,
y es cierto que mis manos no arden con otra piel,
ni mis labios responden ante otros besos.
Sigue intacta tu silueta en mi colchón,
y tu aroma, tu esencia, tu olor entre mis sábanas...

(...)

M.L.

jueves, 26 de septiembre de 2013

ENTRE PALABRAS

Y me enredo entre palabras,
de la misma manera que la hierba trepa queriendo ser árbol,

igual que un niño triste se esconde entre los brazos de su madre,
o un gota de agua se funde haciendo charco.

Me lleno de frases, versos y poemas,
ocupando un vacío sinsentido incapaz de explicarse a sí mismo,
reciclando viejas ideas y creando nuevos recuerdos,
imaginando que quizá interesen a alguien...

Soy la misma de ayer,
con los mismos ojos pero con diferente mirada,
los mismos labios, pero con unos cuantos besos de más,
idénticas manos, plagadas de historias aún sin contar,
los mismos pies, aunque con kilómetros de sobra y cansancio a cuestas,
igual corazón, pero ¡ay de él!,
pobre iluso que se entregó hasta la saciedad
para terminar maltrecho y encadenado a la maldición del amor no comprendido.

Me resulta inútil resistirme al poder de la poesía,
del relato en prosa o verso,
de las historias plasmadas de mejor o peor manera.
Me resulta absurdo intentar esquivar esa necesidad de escribir,
pues sé que, tarde o temprano, volveré a verla,
a sentirla, a quererla, a amarla incluso,
aún con todo lo que ello conlleva.
Retornaré a sus incongruencias y sus maldades,
a sus delirios de grandeza aún cuando es poco lo que vale,
a sus gemidos en plena noche reclamando mi atención,
al gran amor de invierno, que en verano se recalienta
y en otoño cae sin remedio posible, 
floreciendo, cómo no, en primavera. Como los cerezos.

Acabaré de nuevo presa de sus encantos,
aunque también de su maldad,
de su ira incontenida y su maldita belleza.
Y es que es tan bella...

Volveré a ti, poesía,
como si nunca me hubiera ido,
y como si nunca me hubieras abandonado.
Volveré a sentirte como un huracán dentro de mi,
como un terremoto de emociones
que de todo me causan, salvo dolor.

Sabes que volveré. Y volverás a amarme.
Porque tú no eres sin mí,
y yo, sin duda alguna,
ya no sé ser sin tí...

M. L.




miércoles, 25 de septiembre de 2013

LLEGADO EL PUNTO...

Y, llegado el punto en que puede más la desidia que la pasión,
la duda que la complicidad, 
el engaño que una sonrisa...

Cuando el gato agota su séptima vida,
el agua ya no corre
y el viento no sopla con la misma intensidad...

Cuando lo dulce nos sabe amargo, 
una caricia es capaz de doler,
una canción trae malos recuerdos
y ese perfume nos hace llorar...

Llegado el punto en que todo cambia,
o quizá nada, y ese sea el problema...

En ese mismo instante, quizá demasiado pronto,
o quizá demasiado tarde,
pero nunca en el momento exacto,
tu corazón te lo pide a gritos,
y ni siquiera eres capaz de descifrar el mensaje.
No quieres hacerlo.

Continuar caminando es sencillo.
Afrontar que la piedra en el camino cada vez será de mayor tamaño,
eso... es una tarea ardua...

M. L. 

martes, 24 de septiembre de 2013

MORIR EN EL INTENTO

He intentado ser feliz.
He logrado algunos instantes de felicidad,
tristeza camuflada entre sonrisas cómplices,
momentos alegres, segundos de placer,
oscuridad cubierta de un blanco radiante...

He intentado ganar enseñando mis cartas,
he sospechado sabiendo la respuesta,
he gritado en silencio
y he llegado a la meta sin empezar la carrera.

He buscado la felicidad,
ansiado un futuro
y soñado una ilusión,
y en todos los casos,
en todos y cada uno de ellos...

he muerto en el intento...

M. L.

domingo, 8 de septiembre de 2013

YO

Siempre despeinada, y siempre con lo puesto.
Ando alborotada por la vida
como aquél que nada tiene que perder,
tan sólo el tiempo.
Suspiro demasiadas veces al día, quizá,
o demasiado pocas,
añoro tantas otras,
y lloro cada vez que no tengo motivos.

Mi sonrisa transmite simpatía
cuando quizá ande rota por dentro, o... ¿quién sabe?
Mis andares, firmes aunque dudosos,
me llevan a lugares donde jamás quise estar.

Sueño cada día un poquito más,
¿a causa de qué?, pregunto yo...,
escribo, canto, relato, no callo, molesto, susurro,
me canso de ser yo, y, otra vez, comienzo de nuevo.

Soy yo y mis circunstancias,
a veces tan vanales, otras tan profundas,
mis recuerdos, mis palabras y, sobre todo, mis silencios,
mis ganas de sentir y de entregarme
junto al miedo de retomar antiguos sentimientos,
mis ojos como la hierba,
mis labios sonrosados, 
mis manos temblorosas al compás de cualquier melodía pegadiza,
mis oídos siempre atentos,
mis piernas pequeñas y carnosas,
mi cuerpo y mi alma,
dos en uno,
o quizá, una que se esconde dentro del otro...

M.L.

sábado, 7 de septiembre de 2013

MÁS QUE DOS

No es que te extrañe,
es que ansío a cada instante el aroma de tu pelo y tus caricias.
No es que te quiera,
es que tus ojos son aquellos que deseo en cada despertar.
No es que te desee,
es que tus curvas me hacen perder la cordura,
y me llevan a un lugar infinito plagado de placer.
No es que me gustes,
es que tan sólo tus ojos
pueden transmitir tanto, incluso estando cerrados.

No te amo, mi vida, no te amo.
Te llevo tan dentro que es más que amor.
Tus labios son tan dulces que temo morir por sobredosis,
mas bendita muerte sería.

No te escribo,
pues todas las palabras del mundo
quedarían insignificantes ante un mínimo susurro tuyo,
un gemido, un suspiro, o simplemente tu respirar...

No es belleza lo que admiro cuando mis ojos te recorren,
es mucho más, más que una diosa recién tallada por las manos más expertas.

No es amor ni pasión,
no es arrebato ni locura.
No es más
que el sentimiento más bello del mundo,
la sensación más desconocida y a la vez más sentida.
No es más, que más que amor,
más que pasión,
más que arrebatos de locura contenida.
Más que tú. Más que yo.
Más que dos.


- M. L. -

martes, 3 de septiembre de 2013

ES POSIBLE...

Y es extraño contemplar
cómo a veces, lo más sencillo se convierte en algo imposible,
cómo el entendimiento se transforma en sordera,
o las palabras en balas mortales.
Cómo lo cotidiano se torna extraño
o lo amado en olvidado...

Esperar es sinónimo de angustia,
sorprender, de utopía,
el dolor se nos antoja inevitable,
y la paciencia inexistente.

¡Ay, Señor!, seas quien seas...
No llegará mi alma a comprender
el porqué de tantos "¿por qué?", 
la necesidad de tanto complicarse,
o la muerte de algo tan vital como la sinceridad.

Quizá sean cortas mis entendederas,
o quizá tan sólo analice, piense, y hable demasiado.
Tal vez mi vida pueda simplificarse,
y me empeñe en volcar mis esfuerzos en cambiar lo ya fijado.
Es posible que sospeche demasiado, y pregunte más aún.

Y, efectivamente... es extraño contemplar
cómo a veces, lo más sencillo se convierte en algo imposible,
cómo el entendimiento se transforma en sordera,
o las palabras... en balas mortales...


M.L.



viernes, 3 de mayo de 2013

APRENDÍ

Y aprendí,
que el cielo a veces viste de tormenta,
que es posible volar, pero sólo si lo intentas,
que tan sólo una caricia puede remover el mundo,
y un segundo, puede remodelar vidas enteras.

Aprendí a sonreír cuando por dentro lloraba,
y esperaba cuando quizá jamás debí esperar,
susurré tantas palabras que se fueron con el viento,
y grité cien mil lamentos que nunca quise gritar.

Suspiré, me di de bruces con la realidad,
vi que había un "más allá" cuando no quería mirar,
fui cobarde y aprendí a ser valiente en la batalla
que libraba cada día nada más despertar.

Regalé mil besos cargados de inspiración,
compartí mi habitación con "te quieros" alquilados,
sufrí por amor, por rencor y por orgullo,
disfruté de las ventajas de inventar mi propio mundo.

Fui lo que esperaban, y a veces tan sorprendente,
fui incluso doliente si hablamos de desamor,
y en amor puedo ser niñata desesperada,
o experta en cuestiones de hablar con el corazón

M.L.

martes, 30 de abril de 2013

AFUERA LLUEVE...

Es extraño...

Ahí afuera llueve a mares. Litros y litros de agua que se pierden entre las juntas de las baldosas, los adoquines, el asfalto, la ropa de la gente, los paraguas... Hace frío, y la gente se guarece bajo capas de ropa que esconden cualquier resquicio de humanidad. Y es extraño.
No hablo de sentir frío por las bajas temperaturas, ni de temblar por un escalofrío inoportuno. No hablo de gorros de lana ni de abrigos enormes adornados con bufandas. No pretendo hablar de eso.
Hablo del frío de la ausencia. Del calor que desprenden dos cuerpos unidos que comparten algún tipo de sentimiento que tan sólo ellos conocen. Hablo de cubrirse con la piel, cuando el resto del mundo huye de la húmeda e indeseable lluvia. Hablo de los momentos a solas que jamás deben ser compartidos.

Es extraño, sí, extraño el hecho de ausentarse de todo, tan sólo por unos labios, una mirada, un suspiro... Que alrededor todo se mueva, y en un pequeño espacio se detenga el tiempo, a causa de una caricia que eriza hasta la más ínfima capa de piel. Que el olor que se desprende no sea el de la tormenta, sino el de un torbellino de emociones entrelazadas, causantes de más de una sonrisa.

Es extraño, creedme, cuando, a pesar de nuestras ansias de control, en esos momentos llamemos a voces al descontrol más absoluto y ciego, a los deseos más primarios y escondidos, fundidos con un toque de dulzura proveniente de unos labios pecadores. Pero en contraposición, no resulta tan extraña la idea de la repetición cuando estamos hablando de nosotros. 

Afuera llueve, pero es aquí dentro donde nos mojamos.

M.L.

lunes, 22 de abril de 2013

ÁMAME, TE DIJE...


Participemos en el juego que proponen nuestras miradas. Seamos cómplices del silencio, y no esclavos de palabras. Disfrutemos de la sorpresa de lo inesperado, del susurro de mis manos en tu pelo, de la sonrisa tímida que esconde frases no dichas, de la dulzura de saber que tan sólo depende de nosotros…


Anhelemos el momento no vivido, el beso no robado aún, la brisa de un “te quiero” inaudible, la sospecha de la eternidad de una caricia… Mírame a los ojos, y lee en ellos cuanto callo, cuanto debo mostrar con hechos, pues el viento nos robará cuanto digamos.


Intuyo deseos de ser tu espacio, tu camino aún por descubrir, tu anhelo de libertad en días de cárcel, tu sombra en tiempos de desaliento… Brotan ansias al pronunciar tu nombre, soñar con tu boca o rozar tus caderas de manera más o menos casual. Soy errante entre tus curvas y peregrino en el camino hacia tu felicidad…


Ámame te dije, y así fue. No con promesas vanas ni cuentos con finales inventados, no con volátiles palabras, sino con la complicidad del roce de tus labios, no con el tiempo justo, sino con todo aquel que desees darme… 

Ámame te dije, ámame sin condiciones pero con miedos, sin falsas esperanzas pero con pies de plomo, sin recuerdos pasados ni vistas al futuro… Sé tan sólo mi presente, mi ahora, mi instante… Sé aquello que deseé, sin pensar en lo que desearemos luego.


Escrito el 26 de Octubre de 2012 

M.L.

miércoles, 10 de abril de 2013

VERSOS

Recuerdo que jugaba, recuerdo que soñaba,
recuerdo que pasaba largas horas en la cama.
Recuerdo que el primer amor fue dulce y traicionero,
que al final del cuento siempre hay moraleja, y lo prefiero.

Enamorarme, reirme, besar, decepcionarme,
soñar con el amor cuando lo tengo delante,
sonreir sin prejuicio, quien no quiera que no mire,
mi tristeza no es visible, me gusta sentirme libre.

Me acuerdo de las tardes paseando sin destino,
con amigos o vecinos, no existían enemigos,
queríamos llegar a tocar el cielo algún día,
no sabía que en sus brazos yo sola lo alcanzaría.

Hicimos mil promesas de amistad y confianza,
jugábamos a ser mayores, bendita ignorancia,
la inocencia perdida me muestra cuanto aprendí,
que no es más fácil sonreír que explicar lo que te pasa.

Cuento por millares las veces que naufragué,
tan sólo unas pocas en las que creí vencer,
aprender es la clave, sacar en conclusión
que si ofreces un perdón ganarás algo más grande.

Y hablo de amor como de algo tan difícil,
que cuando lo tienes duele y es tan fácil de perder,
pero que a la vez buscamos como un tesoro escondido
que alguien puso en el camino acompañado de placer.

Si mi almohada hablara... pobre de ella,
sospecho que sabe mucho más de lo que enseña,
noches dando vueltas, gritando en silencio a oscuras,
noches compartiendo la mayor de las locuras.

Soy tan diferente que termino siendo igual,
soy difícil de tratar, víctima en la intimidad,
un cordero degollado pero con la piel de lobo,
un charco de agua que se ha transformado en lodo
.

M.L.

domingo, 3 de marzo de 2013

A TÍ, QUE YA NO ESTÁS...

Querida Evina:

Hace dos días que te fuiste. Hace dos días que me llegó la noticia de que nos habías dejado... Pero sin querer, porque sé que tú no nos dejarías de repente sin un buen motivo.
Tu corazón dejó de funcionar. Un corazón bueno, sin ningún tipo de maldad y con mucho amor, cariño y pasión que dar. La misma pasión que ponías en todo lo que hacías, ya sea cantando tonada, tocando la gaita, con tu queridísima Hermandad de los Estudiantes, investigando el folclore de tu amada Asturias, hablando de ese precioso Tazones donde ibas cada verano, o acudiendo a un partido de tu aclamadísimo Real Oviedo... En todo ponías el mismo sentimiento y las mismas ganas. No te rendías ante nada y siempre tenías una palabra de aliento hacia los demás, transmitiendo esa fuerza y esas ganas de vivir que te caracterizaban.
El último día que te vi fue en el Teatro Filarmónica. A mí me tocaba participar en el Concurso de Canción Asturiana, y, cómo no, tú estabas ahí... Nerviosa, entusiasmada, y "orgullosa de ser mi amiga"... Esas palabras quedarán grabadas en mi cabeza, junto con tus abrazos y tus ánimos. Somos nosotros los que tenemos que estar orgullosos de que hayas pasado por nuestras vidas, porque estoy segura que ninguna de las personas que te conocía puede olvidar lo vivido contigo...
Hoy ya no estás pero, de una manera ineludible, sigues aquí. Aún me cuesta creer que no vaya a verte el próximo día que actúe, ni en las espichas de la Escuela de Música, ni en ningún otro sitio, aunque estoy segura de que, estés donde estes, disfrutarás del sonido de la gaita, los bailes improvisados, y todo nuestro cariño. Mi voz seguirá sonando para ti de manera incondicional, no se me ocurre mejor manera de devolverte todo el apoyo y el cariño que me demostraste desde el momento en el que nos conocimos...

Descansa en paz Eva. Te envío al cielo una de mis canciones, esa que siempre te hacía llorar y que nunca te cansabas de escuchar.

https://www.youtube.com/watch?v=V2aATNEah4E

Hasta siempre amiga.

domingo, 24 de febrero de 2013

UN MOTIVO PARA ESCRIBIR

(...)

Y es que tengo la cabeza repleta de poesía,
cantar es, cómo decirlo, como una forma de vida,
sin la cual no existiría, estoy segura, moriría,
sin canciones, sin poemas, sin música no hay salida.

Y llevo escrita en mi piel mi pasión por las palabras,
no encuentro mejor manera de expresar que a través de ellas,
da igual que llores o rías, siempre sale una canción,
y, son las mejores letras las que surgen del dolor.

Son más de trece años relatando mis historias,
en trozos de papel, servilletas o donde caiga,
la inspiración no avisa, llega cuando no se espera,
y es sincera, jamás deja indiferente cuando llega.

Le escribo al amor, al dolor, a la esperanza,
a las ganas de seguir, o no, a todo lo que pasa,
a mi gente, pues claro, sin ellos no valdría,
estoy hecha de recuerdos, de sueños y poesía...

M.L.

viernes, 25 de enero de 2013

LLUEVE


Camino por la calle bajo la lluvia sin pensar en nada, mojándome sin ni siquiera darme cuenta, sin reparar en que, por mucho que corra, unos pasos más alante, sigue lloviendo... incierta paradoja.

La gente se cubre con enormes paraguas, los bares recogen sus terrazas, los niños lucen llamativos chubasqueros mientras sus padres les prohíben algo tan divertido como ir pisotendo cada charco que se encuentran a su paso... La ciudad se sume en un manto de oscuridad, tristeza y humedad, cambiando rutinas, rostros, e incluso carácter, tan sólo porque llueve...

Sin duda alguna, el hecho de que el cielo nos observe con semejante crueldad nos hace sentirnos vulnerables, débiles, e incluso infelices. ¿Cómo sonreír si nos cubre una capa de agua, negrura y tempestad?... Ni siquiera el viento se lleva nuestras peores pesadillas, ni siquiera el frío congela nuestros pensamientos, librando nuestra cabeza de inoportunidades... Ni siquiera eso.

Pero es sólo agua... Sólo una bajada de temperaturas, un prólogo al invierno, un preludio al verdadero frío, a la verdadera época gris del año... Tan sólo llueve, dentro y fuera de nuestros corazones... del cielo caen gotas, y de nuestros labios se escapan suspiros de desilusión, de cansancio, de tristeza...

Pero a día de hoy tan sólo se me ocurre una frase infinitamente cierta y apropiada:

Sabiendo que el sol se esconde en alguna parte sólo nos queda pensar que "no llueve eternamente"...

Escrito el 9 de Noviembre de 2010

M.L.

martes, 22 de enero de 2013

SI PUDIERA...

Si pudiera desnudar ese destino y plantarle cara como jamás antes lo hice.

Si me atreviera a invadir su más profunda intimidad sin ni siquiera pedirle permiso.

Si mis manos tuvieran fuerza suficiente para apretar el gatillo que rompería con cada duda, cada sarcasmo, cada mentira...

Si mis piernas no flaquearan, ni mi boca temblara cada vez que... cada vez que me desnudo ante su sombra...

 
Si ese olor no trajera a mi mente más de cien suspiros,

si el suave susurro del viento no me sonara tan estridente hoy...

Si las palabras no volasen y las promesas se cumplieran.

Si mis armas no hubieran quedado al descubierto, y mis cartas puestas sobre la mesa en esta partida contra mis miedos,

si no fuera falso todo cuanto creo en estos momentos...


Si toda la sal del mar me devolviera la vida,

si miles de años luz lograran mitigar tantas ideas infundadas, causas perdidas y recuerdos sin excusa...

Si el color de mi día a día quedara teñido de negro, o quizá de gris,

si las pequeñas gotas de mis lágrimas se transformaran en lagos...


Si la hierba no rozara mi piel como espinas de la rosa más bella,

si fuera cierto...


Si fuera así...

o si no lo fuera...


Sea como fuere... así será...


Escrito el 7 deMarzo de 2011

M.L.

lunes, 21 de enero de 2013

No olvido el poder de la compasión,
cada una de mis letras lleva un trozo de perdón,
y tal vez sea esta la forma de explicar
cómo siente mi alma, cómo llegué a este lugar.

Tan sólo 12 años y ya me perdia entre versos,
meciendo pensamientos entre frases y recuerdos,
libretas que desprenden lo tierno de aquellos años,
poesías que hacen crecer junto con los desengaños.

A la luz de un flexo dejo fluir mi memoria,
relato mis pensamientos, pequeños trozos de historia,
dulces pero amargos, todo tiene su por qué,
o quizá no, aún no lo sé responder.

Puede que mi vida no haya sido tan difícil,
pero quién puede juzgar mis letras si no me conoce,
duele más lo duro de perder a quien se quiere,
que mil dagas en el corazón, cuando tanto se siente.

Es por mis abuelos, por mis padres, por mi hermano,
es por mis amigos por los que sigo cantando,
es por el amor, por él siempre, sin dudarlo,
es por tantas veces que me deshice entre llantos.

Llevo tatuada para siempre mi pasión,
en mi piel, con tinta negra, y dentro de mi corazón,
no hay razón pa sentirme mal, si tengo mis rimas,
no hay razón pa sentir dolor si tú me mimas.

Recuerdo veranos paseando con mi gente,
por el pueblo, sin procupaciones, creyéndonos fuertes,
deja que te cuente, esta es mi historia,
aunque hayas crecido, la infancia siempre se añora.

M.L.

TODO CAMBIA

Todo cambia.
La gente, las ciudades, e incluso los sentimientos. Todo cambia.

A veces pararse a pensar no es la solución correcta pero... ¿acaso existe un manual de "cómo vivir sin preocupaciones"? No lo creo.

La sinceridad daña, perfora, lastima y remata... sí, también es la mejor de las opciones según dicen por ahí pero... ¿hasta qué punto? ¿Qué grado de sinceridad es el que exigimos, y cuánto estamos dispuestos a ofrecer?

No todo acaba como debería, ni empieza como esperamos, pero, también es cierto... que se vive mejor cuando nada se espera.

M.L.